domingo, 30 de noviembre de 2014

Calidad.

A la hora de comprar, muchas veces nos dejamos impresionar por el término "Calidad", con mayúsculas. Parece que el marchamo impregne al producto en cuestión una valía muy superior al resto. 
¿Es así con las alfombras?, ¿cómo establecer la calidad?
La respuesta es en realidad simple.
Partimos de la base que se han de comparar alfombras de un mismo origen o que estén etiquetadas de la misma manera, y luego probar.
Una alfombra de gran calidad no significa que técnicamente sea una maravilla, y viceversa, una alfombra técnicamente estupenda no tiene porque ser una alfombra de calidad.
Una comparación que aunque no muy exacta puede ilustrarnos. Hay muchas "tablets" e incluso modelos de "ipads", pero aunque exteriormente son muy parecidos no tienen nada que ver. 
En las alfombras lo que les diferencia son también las "entrañas". Una alfombra de calidad extrema suele tener una lana y una seda excelente, por poner un caso, el artesano y el empresario no se la pueden jugar.
Es en el caso de las alfombras cuya ejecución no es muy complicada donde entran en juego la calidad de los materiales empleados y la destreza de los artesanos.


  •  ¿Porque utilizar un algodón de gran calidad para la urdimbre si el occidental que vaya a comprar esta alfombra no la tendrá más de 10 años en su casa?
  • Si total cuando lo vaya a lavar, habrán pasado ya cuatro ó cinco años y si se resquebraja el algodón al hombre poco le va importar.
  • ¿Y la lana?, pongamos una que no haya sido convenientemente lavada y que aún contenga lanolina. Total cuando se enegrezca con el uso , el hombre occidental lo lavara una , dos ,tres ó incluso cuatro veces para que se vaya diluyendo ésta. Además  a él que carajo le importa esto si en verano hasta las retiran.
  • Y si encima con el lavado pierde pelo, pues mala suerte. "Ya se sabe es un producto artesano".
   Lo que el cliente comenzará  apensar entonces es que el descuento de más del 40% que le aplicaron no era tal. 
    Hay muchas empresas, e importadores que se dedican a comprar remesas de pésima calidad y hacerlas pasar por alfombras de calidades superiores.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Vamos a ser malos Catalanes...


  Es éste un post que escribo -y lo confieso abiertamente- motivado por la envidia de "botiguer", término maravilloso catalán que sirve para designar al tendero de toda la vida, pero que en catalán adquiere una dimensión superior pues abarca un colectivo imaginario muy superior y en el que caben todos los comerciantes.
  Aclaro, que con todas estas movidas políticas siempre me he declarado "botiguer" antes que españolista o catalanista.
   El tema es muy recurrente hoy en día, pero vuelo a algo que ya conozco. Todo nació con este artículo: 
       http://www.elmundo.es/cataluna/2014/03/10/531e191c268e3ec42f8b458d.html

En ella se trataba del tema de la limpieza de alfombras en el ayuntamiento de Barcelona. Y daban cifras: 55.000 euros para 613 m2. Casi 90 euros por m2. No es que en una tintorería le cobren a uno 7/8 euros por m2 y si es manual y de seda natural 20. Es la cifra: 90 euros. Pongamos por caso que había dificultades de mover etc. Doblamos el precio. Sigue siendo menos de la mitad del lavado de una alfombra fina. No se lava con maquinaria pesada, simplemente se extiende en una superficie grande, se lava y se deja secar.
Y sé quién las lavó, y lava.

Posteriormente, "crucé" la plaza plaza de Sant Jaume y me colé en el Palau de la Generalitat. Todo por un reportaje de Jordi Évole, éste mostraba la residencia del president de la Generalitat con muebles de los 70, y una alfombra que había resistido magníficamente el paso del tiempo y estaba impecable. Señal inequívoca de que nadie pasaba por allí. Pero en las recepciones, cuando dejan que las cámaras aparezcan con el visitante en una especie de sala,las alfombras que aparecían eran espectaculares, y no duraban más de dos años en su "puesto", la casa era realmente grande. Y todos en el sector mascullábamos quien era el guapo que les vendía. No lo supe hasta hoy. La tienda más -exageradamente- cara de Barcelona. Exagerada quiere decir que si la alfombra vale 2.000 euros, a usted le va costar 4.500 (puede añadirse un cero de más tranquilamente) . Usted es ustedes y yo. Seguiré 


miércoles, 19 de noviembre de 2014

Westwing

Mucho se habla en los últimos meses de esta web de ofertas y liquidaciones que ofrece descuentos increíbles de muebles , ropa de hogar y alfombras. De todo sé un poco, y de lo que sí sé un mucho son de alfombras, y ante preguntas que me hacen muchos amigos sobre si valen o no la pena los productos que ofrecen me he decidido a escribir este post.

La metodología es muy simple (y compleja) . Un montaje, captación de tiendas o empresas con productos en liquidación o precio de saldo, en depósito, con condiciones de devolución si el cliente no está satisfecho y una presentación impecable y un seguimiento constante.

Tres líneas para algo que daría para mucho más seguramente.

Y llegados a este punto, la pregunta sería ¿realmente el precio de las alfombras está tan rebajado?. La respuesta es muy simple. ¿Quién establece el precio de venta inicial?  . El vendedor , aún así la respuesta viene incompleta. En multitud de alfombras (kilims sobre todo) el precio esta hinchado, a veces exageradamente, y muchas veces no se explican algunas características de las alfombras. Por lo que en ese sentido técnicamente no se está engañando al cliente, pero prácticamente sí, porque el profano no tiene puntos de comparación.
Pero también hay chollos verdaderos, pero éstos hay que buscarlos en alfombras, que generalmente no nos gustarán , porque suelen ser alfombras de diseño contemporáneo y que tuvieron su tiempo o época. En estos casos, el precio más que el descuento es muy atractivo, pero claro, suelen ser piezas de difícil encaje, y siguen adoleciendo de una descripción en más detalle. Alfombras de lana hay muchas.Y calidades de lana también. Y cuando más barata es una alfombra (sobre todo cuando faltan datos), peor suele ser la lana, y eso es algo que sólo se puede apreciar al cabo de varios meses o tras un lavado.
Finalmente cuando uno se da cuenta que el producto no es lo que te han dicho, han pasado meses o incluso años y a uno no se le ocurre reclamar ,cuando -amén de garantías- una alfombra hecha a mano es un producto con una longevidad muy alta.

martes, 7 de octubre de 2014

EL Éxito


Cuando uno se metió en este negocio, pensó en él como una empresa con un proceder y ser único. Las circunstancias me hicieron replantearme la forma del mismo. Los tiempos han cambiado una barbaridad y la escala de valores también. Tenemos una extraña facilidad para soltar frases de aparente calado sin llegar a pensar en ellas. Y la penúltima frase es un ejemplo. Hoy en día nada se parece a lo que era hace 20 años en el tema de las alfombras. Y he aquí una explicacion.

  1. Antaño, el mercader de alfombras iba al origen, conocía a los proveedores, y éstos le enseñaban la mercancía, lo elegías y tras unos meses, ésta llegaba y pasaba por dos pruebas: La aduana y unos impuestos terribles, y el comprobar que todo lo comprado y anotado en papel, llegaba (con suerte era mecanografiado). El romanticismo quedaba para los viajeros europeos que narraban como en un burro habían alcanzado una aldea que producía unos tejidos maravillosos...Tonterías. 
  2. El paso intermedio fue cuando comenzaron a aparecer empresas mayoristas en Europa. Éstas en su gran mayoría era de capital Iraní, Afghano, e incluso turco. Se establecieron sobre todo en Hamburgo, Alemania, en la zona Franca, pero también habían grandes almacenes en Suiza e Inglaterra. Fue una revolución, porque ahora podías elegir la mercancía aquí "al lado", y por un pequeño sobrecoste te llegaba en 15 días. El problema fue que apareció el Euro. E Internet.
  3. De repente todo el mundo se hizo rico y la demanda se disparó. Además ahora se disponía de una divisa potente, medios de transporte increíbles y unas aduanas laxas en muchos casos. Pero fue entonces cuando la picaresca se disparó en el sector. Fue y es en muchos sentidos la época de las "subastas", alfombras de diseño. Muchísima frusilería y gente dispuesta a pagar por lo que no conoce. Y lobos con piel de cordero. 
  4. En invento del siglo XXI es más viejo que la Tos, dar gato por liebre, aunque el gato sea extraordinariamente bello. Y con un envoltorio único, fotos irreales y de una calidad que echa para atrás. Pero irreales al fin y al cabo. Es como las televisiones planas. Cada 18 meses hay algo nuevo y esa maravilla que tenemos en casa no sirve...

viernes, 23 de mayo de 2014

Pakistán y la producción de alfombras. Apuntes

Pakistán es el país de "los más puros", para los que tratamos con ellos el país en donde nacieron los auténticos Talibanes, pero también es un inmenso país en cuanto a población , y una parte de esa población (no muy importante en cuanto a % de su población) se dedica a la fabricación de alfombras.

La crisis les ha golpeado muy duro de ingresos de más de 300 millones de dólares han pasado a poco más de 110. 

Los importadores occidentales les han abandonado (curiosamente ellos siempre se refieren a los occidentales como sus "partners").

Y ¿cómo ha afectado a la industria local?. Para entenderlo uno ha de entender que la mayoría de las tejedoras eran mujeres, ¿porqué? pues porque era un trabajo que podían ejecutar desde casa. El intermediario les traía los telares y las lanas. Ellas hacían el trabajo, éste se llevaba la pieza, la lavaba y la vendía por un precio 10 veces superior al que pensaba pagar, pensaba porque sólo después de venderla pagaba. Además de someter a una gran tensión por los plazos de entrega. 

Ahora se da la paradoja que al disminuir la demanda, los plazos de ejecución se  han ampliado,los precios se han disparado y la situación de las mujeres ha mejorado.

Preguntado sobre si las mujeres se sienten explotadas, todas lo niegan, ganan poco proporcionalmente pero es mucho para los villorios en los que viven, y en las que las unidades familiares pueden llegar fácilmente a las 10 unidades.

Una vez, Álvaro de Cózar, un buen clieynte y naturista me contó que trabajó en Vietnam estudiando a no sé qué reptiles. Y que en la zona habían dos megafactorías una de Ikea  y otra de Nike, y que curiosamente la gente "explotada" era la más feliz. Familias enteras trabajaban y ya no tenían que cambiar a una hija por una lavadora...

viernes, 14 de febrero de 2014

La constatación de un timo.



El porqué en las últimas décadas se cambian las cosas de sitio, y se da un valor a lo que no lo tiene es un misterio para mi. Seguramente en las escuelas de alta dirección, publicidad y parecidos el fenómeno estará estudiadísimo, pero yo, francamente sigo sin entenderlo, y lo que es peor constatar que va a más. Veamos:


  1. La manipulación del lenguaje. Se presenta una alfombra hecha polvo, que no destrozada como arte. Todos los adjetivos son referencias a lo culto, elegante, exclusivo. Nos dejamos guiar por lo que no es. 
  2. La falsedad, a través del lenguaje se habla de cosas pretéritas como presentes. "una gran dificultad de ejecución". Efectivamente una gran alfombra cuando tenía pelo, y colores originales. Pero no ahora.
  3. El "experto". Muchos interioristas, por no decir la mayoría, lo único que les mueve es el vil metal. Cosa nada deshonrosa por otra parte, el problema es cuando se prima el beneficio propio por encima de la verdad, es una especie de aquella frase de los periodistas de "no dejes que la verdad te tumbe una buena noticia".
  4. La generación "IKEA", la idea que se transmite si uno se quita la venda es que tu casa es una mierda, pero nosotros estamos aquí para arreglártela de manera cuasi gratuita. Pero la única verdad es que uno ha de hacer un verdadero esfuerzo para acotar y probar lo que realmente necesita. Sólo entonces vale la pena. En todos los escenarios fotográficos aparecen multitud de objetos que aunque lógicos muchas veces no tienen más razón que ser que atraer el interés. Es una especie de reclamo a lo "fast food". Se necesita un tresillo y se acaba con unas plantas de interior y una alfombra de material infecto que va salir muy cara. Pero estás en la "república de tu casa".
  5. La supuesta "honradez" de las ventas on-line. Esto es algo que he descubierto preparando mi web. Que se puedan manipular las fotos es un hecho normal. No sorprende el querer mejorar un producto, pero "tapar" las taras y que el cliente inexperto se quede la alfombra por desconocimiento es muy grave. Hay alfombras espectaculares en web a unos precios sorprendentes. Tiene plug-ins de zoom, y todo es normal, pero...solo mirando la alfombra desde lejos te das cuenta que el lateral está torcido...Si es una tara. Normal en un producto artesanal, pero no en el de máxima calidad. Entonces lo que se hace es rebajar el precio un poco, pero no se ofrece lo que se dice...